Salí a comprar
mi cervecita de la noche
En el camino a aparecieron
cuarenta y siete cucarachas
por que esta oscuridad es tibia
y por que es su temporada.
Y aunque ninguno de los bichos
me había hecho daño alguno
reventé unos cuantos con esmero
hasta llegar a diecinueve o veinte.
De regreso
con la cerveza en mi poder
listo ya para soñar otros mareos
no me atreví
a pisar ningún insecto más
por lo menos hasta mañana,
con otra botella
y con la misma sed.
No hay comentarios:
Publicar un comentario